Cuando los niños comienzan a hacer travesuras en la casa todo se vuelve un caos, hay cosas tiradas por todas partes, las paredes están rayadas, la ropa sucia y en realidad lo mejor de ser pequeños es poder jugar y divertirse con lo que se les ocurra porque la imaginación les alcanza para todo.
Pero en el momento en que los padres deben castigar o reprender a sus hijos, es un poco difícil porque en realidad está bien que se diviertan pero deben saber con qué y cómo hacerlo para no destruir todo a su alrededor. Por eso para este papá es un poco difícil castigar a sus hijos que dejaron un gran desastre con tarros de pintura.
Posted by Andrea Pereira on lunes, 28 de diciembre de 2015
Comparte esto con tus amigos, es bastante difícil lidiar con los niños.
kooo