Compartir en Facebook
Enlace Patrocinado
Anteriormente les mostramos como las máquinas de peluches están programadas para que la “garra” no tenga la suficiente fuerza para atrapar uno y lo deje caer cuando se acaban los segundos para realizar la prueba. Este es el engaño que muchos años ha ocurrido y que ahora sabemos nunca fue falta de habilidad, sino adulteración del juego.
Ahora ha llegado la venganza, y es que al parecer los que adulteraron esta máquina no preveían que algo como lo que verás fuera a ocurrir por una cosa de suerte que ha dejado a estos chicos felices y con unos cuantos peluches que recoger y llevarse hasta para regalar.
Enlace Patrocinado
Estos chicos fueron muy afortunados, comparte este divertido video.
Compartir en Facebook
kooo