Esta es una historia real, y cuenta la triste historia de lucha contra el cáncer de Jessica Whelan, una niña de solo 4 años a la que le diagnosticaron un Neuroblastoma incurable en 2015.
Es una historia fuerte, dura, triste y angustiante, así que hoy despertaste algo más sensible de lo normal, es necesario que respires hondo y cojas fuerza para poder terminar de leer esta historia sin llorar…
Esta historia comienza un 23 de septiembre de 2015, día en que la niña fue diagnosticado con ese maldito cáncer doloroso e incurable. Pero los padres de la Jessica decidieron que no se iban a rendir, y desde ese mismo día comenzaron una titánica batalla contra el cáncer movidos por la fe y la esperanza de que su pequeña hija se mejoraría.
En febrero de 2016, Andy y su mujer crearon una cuenta en Facebook en la que buscaban relatar el día a día de la lucha de su hija contra el cáncer, buscando concientizar a la población sobre los riesgos y el dolor que provoca el cáncer infantil.
Este fue el primer post subido en la cuenta de Jessica Whelan.
“A Jessica le diagnosticaron un Neuroblastoma de grado 4 de alto riesgo el 23 de septiembre de 2015. Esta página la ha creado su familia para relatar su progreso en la lucha contra el cáncer. Como Jessica fue diagnosticada hace unos meses, ahora voy a tratar de subir posts de mi página personal contando lo que vaya ocurriendo. Por favor, siéntete de libre de esta página con amigos y familiares para sensibilizar sobre este cáncer y cómo nos afecta a nosotros como familia”
Desde ese día, esta página de Facebook se convirtió en un libro de vida, mostrando los pequeños pasos que el cáncer daba en el cuerpo de la pequeña.
“La parte final de la conversación (con el oncólogo) trató sobre cuánto tiempo piensa que tenemos con Jessica. Su opinión fue que, con la progresión de su enfermedad que ahora hemos visto, Jessica no tiene más que unas semanas por vivir”.
Días después de la conversación con el especialista, Andy, el padre de la niña subió una de las fotografías que reflejan con más dureza lo que el cáncer provoca en el cuerpo de un ser humano, y más aún en el cuerpo de un niño. Una imagen desgarradora, dura y real. “Esta es la fotografía más dura que he hecho en toda mi vida”, aseguró Andy.
Esta imagen se convirtió en un símbolo de lucha contra el cáncer infantil, es realmente impactante…
Lamentablemente este 20 de noviembre, el cáncer terminó por ganar la batalla, tras tantos meses de lucha, finalmente dejó de sufrir. Jessica falleció a las 7 de la mañana, y fue así como su padre informó del fatal desenlace que su hija sufrió…
“Me siento aliviado y triste por informar a todos ustedes que Jessica finalmente encontró la paz a las siete de esta mañana. Ya no quiere sufrir, ya no quiere sentir dolor de las limitaciones físicas de su cuerpo. Ahora mi princesa ha extendido sus alas de ángel y ha ido a jugar con sus amigos y seres queridos. Ahora velará desde allí arriba por su pequeño hermano y por nosotros mismos hasta que un día nos volvemos a reunir de nuevo.
Anoche ella finalmente me permitió tenerla en mis brazos y nos dimos un gran abrazo. Le dije cuánto la amaba. Le dije que cerrase los ojos y que durmiese. La besé en la frente y en sus labios en numerosas ocasiones. Es lo que necesitaba para finalmente encontrar consuelo en su muerte. Ocho horas después de ese abrazo ella finalmente tomó su último aliento. Ella era una niña de papi, desde el principio e incluso hasta el final. Siento que una gran parte de mí ha sido arrancada, pero estoy contento de que yo pudiera darle ese consuelo en sus últimas horas. Ella murió en paz y con serenidad, sin ni siquiera un murmullo.
Gracias a todos y cada uno de ustedes que han compartido y ha sido una parte de nuestro viaje. Ahora pido privacidad para nosotros y nuestra familia, para llorar la pérdida de nuestra hermosa princesa.El corazón de un padre de la más increíble y hermosa chica”
Pero el dolor no se iba y este lunes, Andy publicó un ultimo desgarrador post en Facebook reflejando todo el dolor y desesperación que sentía. Las palabras tienen una mezcla desgarradora de dolor y de ternura…
“No estoy preparado para dejarte ir Jessica, eres mi pequeña princesa. Eres la niña más increíble, fuerte y valiente y me siento bendecido de ser tu padre.
Jamás volveré a escuchar tus gritos de alegría ” papá!!!” al entrar por la puerta. Nunca más volveré a oír esa risita contagiosa mientras subes y saltas sobre mí cuando jugamos a las peleas.
Tengo tantos recuerdos tuyos maravillosos, y si embargo tan pocos al irte tan joven. Yo debería estar planeando nuestro próximo viaje familiar, no aquí, planeando tu funeral. Yo debería estar cantando junto a ti tus canciones favoritas, no añadiéndolas a una “playlist” para reproducirlas mientras te decimos adiós.
El vínculo que tú y yo tenemos es asombroso, siempre la niña linda de papá, que se calma solo cuando te rodeo con mis brazos. Lo siento por no haber podido protegerte de este mundo malvado, pequeña, siento que hayas tenido que sufrir de la manera que lo hiciste. Me rompe a pensar en lo que has tenido que sufrir durante un cuarto de tu corta vida y será causa de mis pesadillas en los años venideros.
Te extraño mucho niña, extraño tu voz, extraño tu sonrisa, extraño tus brazos alrededor de mi cuello, abrazándome. Extraño tu declaración espontánea de “te amo papito”, algo que decías varias veces al día. Te extraño Jessica, las lágrimas caen por mis mejillas y mojan mi almohada cuando pienso en ti y en el lazo que compartimos.
Buenas noches mi ángel hermoso, por favor, ven y dame un abrazo mientras duermo”
La vida puede ser bastante dura aveces, pero… ¿que puede ser peor que perder a un hijo?
Descansa en paz Jessica.
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