Hay especies que nos dejan con la boca abierta por lo extrañas que parecen ante nuestros ojos. Eso ocurre principalmente cuando se descubre a alguna especie marina que vive a profundadas submarinas donde el hombre no puede llegar pero ahora un nuevo caso ha salido a la luz.
En las cuevas de Eslovenia ha nacido un ejemplar de una especie muy rara lo que ha causado conmoción no sólo en ese país sino también en el resto del mundo. Se trata de una cría de dragón cuyo nombre científico es proteus anguinus que tiene la forma de un gusano muy largo con mandíbula cuadrada.
Se espera que en los próximos días nazca una veintena de estas criaturas resguardados en un acuario de la cueva Postojna en Europa que es visitada por más de 700 mil turistas al año.
El primer nacimiento de uno de estos dragones tuvo lugar recientemente.
A esta especie también se le conoce como salamandra albina y es un animal acuático que mide unos 35 centímetros y cuyo hábitat exclusivo son las cuevas kársticas.
Una leyenda cuenta que los habitantes cuando veían uno creían que se trataba de bebés dragones y por ello nadie se atrevía a entrar a las cuevas.
Además cuando de las cuevas escapaba bruma, la gente pensaba que era humo de dragón.
Su alimentación se basa rara vez en microcrustáceos y pueden estar 10 años sin ingerir alimento logrando vivir hasta un siglo. Esta especie tiene un olfato muy desarrollado y se cuenta como uno de los cavernícolas más grandes y el más depredador del mundo.
Tras el nacimiento de 20 de estos animales los científicos podrán hacer un seguimiento de su crecimiento. Para contar uno de estos “dragones” como adulto tiene que llegar a medir más de 10 o 15 centímetros.
Esta especie esta considerada como vulnerable ya que si se pierde la pureza de las aguas de las cuevas kársticas esta especie podría desaparecer lo que es una gran preocupación ya que su hábitat natural sólo se encuentra en Eslovenia, Croacia y Bosnia-Herzegovina.
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