A veces un “ te amo” cuesta mucho y hasta un “ te quiero” no nos sale por diferentes razones como pueden ser vergüenza, temor de parecer un niño o simplemente porque las palabras no nos salen aunque sintamos esto profundamente por nuestros padres, hermanos y otras personas.
Este es el testimonio de un joven que debió decidir entre dejar morir a su madre o intentar que ella viviera pero en condiciones deplorables. Su decisión fue dura pero antes de dejarla partir le dijo todo aquello que se guardó toda la vida y que eran cosas muy importantes que no se atrevía a decir. Un mensaje que nos enseña a no dejar para el final esas palabras sino a decirlas y recordárselas a los demás todos los días.
Este joven tiene un mensaje que nos hace reflexionar, compártelo con tus amigos.
kooo