Cuando conducimos un automóvil pocas veces nos preguntamos qué tan importante somos para las personas que nos esperan casa. Lo rápido de la vida muchas veces nos acelera a tomar decisiones rápidas y sin medir consecuencias. Lo cierto es, que al otro lado de la ciudad, nuestra familia está más atenta de lo que pensamos a nuestra llegada a salvo.
Este emotivo video refleja en 90 segundos la diferencia entre la vida y la muerte, y la importancia que tiene nuestra vida para nuestros seres queridos. Seguramente después de mirarlo, ya no nos dará lo mismo ponernos el cinturón de seguridad o no. Después de todo, nuestra vida afecta a la de los demás también.
Invita a tus amigos a usar siempre el cinturón de seguridad compartiendo este emotivo video.
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