Cuando somos pequeños adoramos a nuestro padre y es como nuestro súper héroe, queremos estar con él todo el tiempo y que se haga el animo para jugar con nosotros, que nos lleve de paseo y que nos cuente un cuento antes de dormir, pero a medida que pasan los años y sobretodo en la etapa de la adolescencia odiamos sus retos, sus conversaciones y por sobretodo que nos cuide exageradamente.
Este video es un comercial de Toyota, pero es tan bello que de seguro te emocionarás. Trata sobre como transcurren los años en el auto familiar y cada momento que se vive dentro de él desde la perspectiva de un padre y de su hija que ven las cosas, a veces de manera distinta. Un hermoso comercial que te tocará al corazón y que demuestra que el amor es invisible, aunque se expresa en cada gesto.
Este comercial es tan emotivo que debes tener un pañuelo cerca, compártelo.
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