En este mundo tan tecnológico y cómodo es muy común ver que la gente ya no se despega de las pantallas, no hace mayores esfuerzos por comer rico y saludable o no realiza actividad física frecuentemente. Todo eso afecta negativamente tanto a la salud física como psicológica, siendo muy difícil poder salir de ese tipo de vida.
Jesse Shand es un joven de 28 años que no hacía más que estar frente al computador día y noche, llegando a pesar 317 kg. Un día se dio cuenta que volver a un peso normal era posible y comenzó a hacer ejercicio y comer más sano. Logró bajar 200 kg. pero ahora tiene un problema mayor producto de su pérdida de peso, ve su historia en el video.
Si crees que con un poco de fuerza de voluntad todo se puede lograr, entonces comparte este video.
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