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Cuando los niños aún no gatean ni caminan sólo están en los brazos de la gente, sentados en un sillón o recostados en una cama o cuna rodeados de cojines, es por ello que a veces, sobre todo cuando llevan mucha ropa se ponen inquietos e intentan mover sus extremidades.
Ahora verás como un bebé que está recostado en su cuna acompañado de un gato comienza a moverse desenfrenadamente, ante lo cual el animal sólo actúa intentando calmarlo pero de una forma muy tierna y tranquila, aunque la verdad no logra mucho con su actuar.
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Este gato es muy tierno, comparte este video con todos.
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kooo