Compartir en Facebook
Enlace Patrocinado
Alrededor del mundo hay muchísimas personas esperando por un trasplante del órgano que requieren para poder seguir viviendo y lo cierto es que los donadores son muy pocos. Tras hallar un donador de órganos, el segundo paso es ver la compatibilidad con la persona que lo necesita lo que hace doblemente difícil el poder salvar la vida de estas personas.
Matthew Parker es un niño que requería urgentemente de un trasplante de riñón para seguir viviendo. Sus padres buscaban un donante compatible vivo ya que está comprobado que los órganos de personas vivas duran dos veces más que el de personas fallecidas. Jamás pensaron que la donante compatible estaría tan cerca de ellos. Mira aquí la historia.
Enlace Patrocinado
Comparte este hermoso y esperanzador video.
Compartir en Facebook
kooo