Los seres humanos siempre han tenido curiosidad por encontrar vida en otros rincones del universo, y tras este descubrimiento de la NASA, es muy probable que estemos cerca de lograrlo.
En un comienzo la idea era encontrar un planeta lo más similar al nuestro para habitarlo, ya que la Tierra actualmente se encuentra muy dañada y se cree que en el futuro será mucho más difícil sobrevivir. De esa manera llegamos al 1 de noviembre del 2015, fecha en que la NASA informó sobre el descubrimiento de un planeta habitable, el detalle es que no está en nuestro sistema solar.
Este desconocido planeta fue nombrado “Kepler” y posee varias características similares a la Tierra, la diferencia es que es tres veces más grande, algo así como Neptuno y un año en ese planeta es de 290 días, más corto que en la Tierra. Además, Kepler está más cerca del sol que nosotros, sin embargo su sol es más pequeño que el nuestro. Otro detalle importante es su temperatura, similar a la de la Tierra en un 95%, así lo explicó Bill Borucki, miembro de la NASA.
Se rumorea que varias naciones ya iniciaron labores para enviar tripulaciones a Kepler, pero lo curioso es que el planeta se descubrió gracias a ciertas ondas de radio que fueron enviadas, aún no se tiene información sobre esto último.
Los ruidos y frecuencias que se captan en el espacio son originados por explosiones y coaliciones de cometas, pero las frecuencias que delataron a Kepler eran muy peculiares ya que tenían un orden establecido, dando a entender que fue provocada o intencionada.
Según la NASA, se estima que pasarán cuatro años más para que el hombre pueda visitar Kepler, ya que no se ha diseñado la nave que pueda realizar un viaje como el que se necesita.
Sin dudas, es un tema que seguirá dando de qué hablar. Comparte esta publicación con tus amigos.
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