En muchos aspectos, los perros tienen sentidos mucho más desarrollados que los humanos para percibir los cambios en el medio que les rodea. Esto los hace capaces de detectar eventos mucho antes que nosotros.
Lo que nos da la sensación de que en algunos casos tienen la capacidad de la precognición. Estos son algunos de los ejemplos más llamativos de situaciones que los perros son capaces de anticipar mucho antes que nosotros.
Terremotos
Son muchos los testimonios que hablan de como los perros se comportan de manera extraña en los momentos previos a que se produzca un movimiento sísmico. Aunque los expertos no se ponen de acuerdo a si se debe a su desarrollado sentido del oído, o a que detectan las vibraciones de la tierra a través de sus patas, si estás en una zona con riesgo de terremoto y tu perro se empieza a comportar de manera extraña, quizá sea mejor tomar precauciones.
Tormentas
Su olfato y su oído detectan cambios en la humedad del ambiente y les capacitan para oír los sonidos de los truenos cuando aún están a muchos kilómetros de distancia y nosotros no podríamos ni imaginarlos.
Enfermedades
Graves enfermedades como el cáncer o la diabetes provocan cambios en nuestro cuerpo imperceptibles para nosotros aun cuando la enfermedad no se ha manifestado. Pero, en ocasiones estos cambios si pueden ser detectados por los perros. Actualmente se está investigando hasta qué punto esto podría aplicarse en la prevención de algunos tipos de enfermedades en el futuro.
Ataques epilépticos
La epilepsia es una enfermedad capaz de condicionar la vida de los enfermos, ya que están a merced de sufrir ataques sin previo aviso. Algunos perros pueden ser entrenados para detectarlos, avisar y, eventualmente pedir ayuda en la medida de lo posible.
Partos
Es habitual que, un día antes de que se manifiesten los síntomas del parto, los perros se conviertan en la sombra de sus dueñas, porque de alguna manera detectan que la hora de la bienvenida está cercana.
Cuando te vas de casa
Los perros pasan gran parte de su tiempo observándonos, de modo que, por tus movimientos y rutinas, saben perfectamente cuando te vas a ir de casa antes de que se lo indiques de manera consciente.
Cuando vuelves a casa
Si estás llegando a casa, ten por seguro que hay alguien desde hace rato alerta, de pie y con las orejas de punta porque hace rato que sabe que vienes, ya que por su poderoso olfato pueden olerte a una gran distancia.
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