Detectar el cáncer en una etapa donde su avance no se ha propagado al resto del organismo puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte, sobre todo cuando hoy la supervivencia a esta enfermedad se ha triplicado.
Aunque no existe una cura definitiva para el cáncer, los tratamientos y el diagnostico precoz hacen que este sea tratable y aunque muchos síntomas se confunden con los de otras enfermedades es necesario que estés alerta por eso debes tener en cuenta la presencia de estos síntomas.
Pérdida inexplicable de peso
Si pierdes al menos 5 kilogramos sin una razón aparente puede ser un síntoma de cáncer y aunque este no es exclusivo de esta enfermedad puede alertarte sobre uno de estomago, esófago, pulmón o páncreas por lo que lo mejor es que consultes de inmediato a tu médico.
Fiebre
Aunque la fiebre aparece cuando nuestro organismo está intentando defenderse de alguna amenaza, esta también puede ser síntoma de que hay presencia de cáncer y un tumor puede estar invadiendo algunos órganos o afectando al sistema inmunológico en el caso de leucemia o linfoma.
Cansancio extremo
Si sin que exista demasiada actividad física aparece un cansancio extremo en nosotros es algo que debemos vigilar. El cáncer de estomago o colon pueden causar perdidas de sangre que no apreciamos a simple vista pero que tienen incidencia en nuestro agotamiento e insomnio.
Cambios en la piel
Algunos cáncer también pueden tener signos en nuestra piel y estos pueden ser presencia de coloración amarillenta, oscurecimiento de algunas zonas, enrojecimiento de la piel, crecimiento excesivo de bello y picazón por lo que estos signos no hay que dejarlos pasar.
Cambios en nuestro aparato excretor y urinario
Si observamos cambios en la consistencia y la coloración de nuestra heces esto podría ser un signo de alerta a problemas en el colon que pueden derivar en cáncer. Más vale observar la frecuencia con la que vamos al baño y si presentamos signos de estreñimiento o diarrea continua.
Las heridas no cicatrizan como deben
Las heridas siempre deben ser desinfectadas pero además de aquello debemos observar la forma en la que estas cicatrizan. Si una herida demora más de 4 semanas en cicatrizar puede ser señal cancerígeno. Si las heridas se presentan en la boca, el pene o la vagina es mejor que nos vea un especialista.
Tos y ronquera persistente
Si la tos se prolonga por más de tres semanas puede ser signo de un cáncer al pulmón, por el contrario si es la ronquera la que persiste, puede ser una alerta de cáncer a la tiroides o la laringe cosa que no debemos confundir con un resfriado mal cuidado pues el tiempo apremia.
Sangrado
Si sangras de manera inusual eso no es un buen signo. Este puede darse a través de la defecación u la orina y también puede hacerse presente cuando tosemos o como una secreción a través del pezón. Además se debe tener en cuenta y vigilar si se hace habitual en la nariz u oídos.
Piel endurecida
Algunos tipos de cáncer como el de mamas, testículos y ganglios pueden palparse. El endurecimiento de la piel o la aparición de bultos puede ser un síntoma para que estemos atentos, por ello es importante realizar palpaciones al menos una vez al mes para cerciorarnos de que no hay nada extraño en los lugares antes mencionados.
Dificultad para tragar
Si bien asociamos esto a la amigdalitis, faringitis o algún resfrío esto debe ser vigilado si se prolonga. Los síntomas antes mencionados pueden tener otras causantes pero más vale prevenir que curar por lo que ponerle atención a las señales que nos da nuestro cuerpo nunca está de más así como tampoco lo está realizarle chequeos para descartar cualquier posibilidad de cáncer.
Comparte este articulo con tus amigos.
kooo